Una tarde, al entrar a una frutería, me percaté de una hermosa sandía fresca, la cual estaba cortada por la mitad, y quise comprarla. Cuando llegué a mi casa y estaba a punto de comerla, empecé a hacerme preguntas tales como: ¿Lavaron la sandía antes de cortarla?, ¿usaron guantes?, ¿el cuchillo con el cual cortaron la sandía estaba limpio?, ¿podría conservarse bien a temperatura ambiente? Ante mis dudas, ya que no tenía la seguridad sobre las condiciones higiénicas y de manipulación al cortar la fruta, decidí no comerla.
Una de las enfermedades que podemos contraer al comprar fruta que ha sido cortada y manipulada en condiciones higiénicas dudosas, es la salmonelosis ¿Qué es la salmonelosis? Es una enfermedad bacteriana frecuente que afecta el aparato intestinal, la bacteria de la salmonella generalmente vive en los intestinos de animales y humanos, y se libera mediante las heces. Los humanos se infectan con mayor frecuencia mediante el agua o alimentos contaminados.
El problema cuando nos ofrecen frutas cortadas en cualquier establecimiento es que no conocemos si las personas que manipularon las frutas tienen certificación para la manipulación de dichos alimentos, o si al menos las manipularon con altos estándares de salubridad. Si la persona que manipula los alimentos es portadora de salmonella y no se lava bien las manos (por ejemplo, luego de ir al baño) podría contaminar las frutas.
Ahora con respecto a mi pregunta, sobre sí una vez cortadas deberían permanecer a temperatura ambiente, encontré información que recomienda que es mejor preferir las frutas con su piel, ya que así estarán totalmente protegidas. En el caso de que estén cortadas ya, es importante garantizar que haya sido de forma higiénica para evitar contraer la enfermedad. También es recomendable refrigerarlas.
Generalmente siempre veo la sandía y el melón cortados por la mitad, sobre todo cuando la sandía es de gran tamaño. Hay ciertas frutas que son ácidas como la piña y pueden protegerse de ciertos microorganismos, pero estos frutos no son ácidos.
Medidas preventivas para la compra de frutas
Usar guantes al comprar las frutas.
Comprar frutas enteras, no cortadas.
Lavar cualquier fruta antes de consumirla.
Escoger frutas que no estén deterioradas o dañadas.
Lavar los utensilios de cocina y las superficies donde se preparan los alimentos (incluidas las tablas para cortar y los mesones) antes y después de preparar frutas.
Cortar y desechar las partes de las frutas y verduras que estén dañadas.
Secar las frutas y verduras con una toalla de papel limpia.
Mantén las frutas y verduras separadas de los alimentos crudos de fuente animal.
Refrigerar las frutas y verduras dentro de las dos horas de haberlas cortado, pelado o cocinado.
Conclusión
Pienso que la mejor opción es comprar frutas enteras, es decir, sin cortar, ya que no podemos garantizar si la manipulación fue correcta, y posteriormente seguir las recomendaciones para una mejor conservación de las frutas en casa.
Referencias bibliográficas
https://www.cdc.gov/foodsafety/es/communication/steps-healthy-fruits-veggies.html
https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/salmonella/symptoms-causes/syc-20355329
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